La Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido (FCA) ha revisado 291 solicitudes de registro de empresas de criptomonedas desde el inicio de 2020, pero sólo el 13% de ellas fueron finalmente autorizadas a operar en el país.
Representantes de la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido (FCA) publicaron una respuesta a una solicitud presentada por un autor anónimo en virtud de la Ley de Libertad de Información. El autor de la solicitud estaba interesado en las estadísticas de registro de las empresas que trabajan con activos digitales.
En la respuesta, el regulador financiero británico publicó los datos solicitados para el periodo comprendido entre el 10 de enero de 2020 y agosto de 2023:
- 291 empresas de criptomonedas solicitaron su registro en la FCA;
- 38 solicitudes fueron aprobadas;
- 5 solicitudes fueron rechazadas debido al incumplimiento de las condiciones de registro, en particular el Reglamento sobre blanqueo de capitales (MLR);
- 22 solicitudes fueron rechazadas debido a la insuficiente información proporcionada en relación con sus actividades con criptomonedas y tecnologías financieras;
- 155 solicitudes fueron retiradas por los propios solicitantes.
Así, en casi tres años, la FCA sólo ha aprobado el 13% de las solicitudes de las empresas de criptomonedas. Entre las principales razones para retirar sus peticiones, los representantes de las criptoempresas señalaron la incapacidad de:
- proporcionar la información necesaria al regulador;
- cumplir con los requisitos del regulador en materia de criptomonedas;
- cumplir con los requisitos de MLR.
Algunas criptoempresas retiraron sus solicitudes porque estaban seguras de que la FCA no las aprobaría. Como recordatorio, en los últimos meses las empresas de criptomonedas del Reino Unido empezaron a experimentar dificultades para acceder a los servicios bancarios.
Hasta la fecha, la FCA tiene registrados 42 proveedores de criptomonedas, entre ellos Skrill, eToro y Gemini. Esta baja concentración de empresas de criptomonedas en el país se debe a que las autoridades británicas han aumentado la supervisión del mercado de las criptomonedas como parte de un programa para contrarrestar la delincuencia económica, ya que los fallos en el marco legal del Reino Unido han convertido al país en el mayor “proveedor” de empresas de criptomonedas fraudulentas.