Resulta paradójico que el nombre del líder a veces sea más esencial para un criptoproyecto que la tecnología o los conceptos básicos detrás de ella, y aquí hablamos de una industria que considera la descentralización y un sistema sin confianza como su agenda principal.
La sociedad todavía tiende a confiar más en un “parlanchín” que en un informe técnico (white paper) que incluye una descripción detallada de los valores fundamentales de un proyecto, su concepto y su hoja de ruta de desarrollo. Incluso si miramos la génesis de todo esto, la gente está más interesada en la personalidad de Satoshi Nakamoto que en sus ideas: ¿quién está detrás de este seudónimo y si algún momento activará sus increíbles reservas de Bitcoin? Al final, las criptomonedas salieron desde el pequeño mundo de los cypherpunks y los criptoanarquistas que soñaban con dinero privado, anonimato y soluciones tecnológicas sin requerir confianza en los humanos. Todos estos conceptos han sido asimilados, si no hundidos, en las reglas globales de la sociedad en la que todavía es habitual escuchar a los “parlanchines”.
El año 2022 mostró claramente la vulnerabilidad de este sistema y castigó a los criptoinversores por su elección de la buena estructura centralizada de antaño, donde el poder se concentra en manos de uno o un par de “gerentes eficaces”, ampliamente conocidos por el público. Este hecho se confirma con la clasificación de las personas más populares en la criptoindustria para 2022, basada en un análisis algorítmico del espacio de los medios durante el pasado año, realizada por Cryptonews.net.
Clasificación de criptopersonas: las personas que deberíamos haber conocido mejor
Cryptonews.net es la plataforma con la aplicación de agregación de noticias más popular, que recopiló y publicó 90.689 publicaciones relacionadas a las criptomonedas en 2022. Un equipo de especialistas analizó los titulares y el contenido de todas las noticias relacionadas a las criptomonedas publicadas que incluían referencias a varias personas. Con base en este análisis, el equipo del proyecto evaluó el peso mediático de cada persona durante el último año y elaboró la clasificación final. Vale la pena señalar que el equipo realizó un análisis de evaluación del año 2021, sin embargo, el mismo no se publicó y se mantuvo para uso interno. Los resultados para 2022 mostraron cambios en las posiciones en la clasificación en comparación con 2021, evidenciando esto en el informe.
El análisis comprendió a varios miles de personas, sin embargo, la lista final incluyó solo a 54 personas. La clasificación es imparcial y refleja indicadores cuantitativos reales, sin opiniones subjetivas: cuanto más a menudo aparece una persona en los titulares y textos de las noticias, más popular resulta esa persona.
Sin embargo, si uno observa el resultado final, se torna bastante vergonzoso para el estado de la industria en general. Una lista notable de personas cuyos puestos subieron debido a un aumento en la cantidad de menciones en 2022 podría denominarse de “personas fallidas”, aquellos que se desacreditaron a los ojos de la criptocomunidad.
Sam Bankman-Fried, Do Kwon, Alex Mashinsky, Su Zhu: el resultado de las acciones de estos tipos se relaciona fuertemente al estado en el que se encuentra la criptoindustria a principios de 2023. Más que eso, cada uno de ellos sigue el mismo patrón:
- Aparecer en el espacio de los medios;
- Aumentar la conciencia y la mención debido a declaraciones y promesas en voz alta: exageración;
- Noticias inquietantes surgen, con un mayor crecimiento explosivo en popularidad debido a eventos negativos.
No encontramos nada nuevo en esta “hoja de ruta”, aunque existe un “pero” importante: esto sucede constantemente en la industria, aquella que tenía como propósito lograr la descentralización, incluido aquel donde el papel de una persona se ve gravemente disminuido.
Además, no se sorprendan por el hecho de que entre las principales “criptopersonas del año” se incluya a Kim Kardashian. Las celebridades han estado promocionando varios tipos de criptoproyectos, incluidos unos dudosos, durante bastante tiempo. Un presupuesto promocional decente les hace hacer la vista gorda ante pérdidas de reputación e incluso directas, como multas y malas inversiones. Un ejemplo ilustrativo es el caso de la superestrella del fútbol, Tom Brady, y su exmujer, Gisele Bündchen. Según los rumores, ambos sufrieron enormes pérdidas al promocionar e invertir en FTX, y recibieron muchos comentarios negativos de los inversores en bancarrota. Algunos comentan que este caso, entre otras cosas, podría ser la razón de su divorcio.
Pero incluso estos eventos escandalosos no desaniman a las estrellas del mundo del espectáculo y del deporte de hacer “shilling” de criptoproyectos y atraer a su audiencia a la industria. Solo se puede esperar que a futuro sus vastos equipos de abogados, financieros y gerentes de relaciones públicas hagan su debida diligencia y eliminen los fraudes en el trayecto.
Los políticos ahora también son “criptopersonas”
La criptoindustria ha llegado al punto en que las autoridades de varios niveles se destacan incluso con más frecuencia que los fundadores y desarrolladores de criptoproyectos. Esto no sorprende, ya que las iniciativas regulatorias para los activos digitales son cada vez más intensas. Se vuelve obvio a partir de la clasificación que las voces de funcionarios estadounidenses como Gary Gensler y Jerome Powell suenan más fuerte. De hecho, el futuro de la criptoindustria en los Estados Unidos, y por lo tanto en la mayoría de los otros países, depende en gran medida de estas personas y sus grupos de reflexión.
La creciente influencia de los políticos sobre el criptomercado puede sonar como un factor perturbador para los proyectos que ahora están bajo una intensa presión por todos los frentes. Por un lado, la confianza de la audiencia se ve perturbada a raíz de los hechos de 2022. Por otro lado, las autoridades aumentan su presión con proyectos de ley, restricciones, investigaciones y juicios.
Entonces, el tema de la importancia de una persona en la criptoindustria nos lleva a una desagradable pero lógica interrogante: “¿Existe alguna garantía de que se pueda confiar en el resto de los principales líderes?” Esta pregunta flota en el aire mientras la audiencia observa más de cerca que nunca cada paso tomado por Changpeng Zhao, Michael Saylor, Brian Armstrong y otros. Esta es una situación incómoda: los resultados de maximizar las relaciones públicas personales son contradictorios para los líderes de la criptoindustria. La fama puede ser una carga, y en estos momentos no hay adónde ir de la atención pública; uno necesita protagonizar el papel principal hasta el final. Mucho está en juego y el futuro de todo el criptomercado ahora depende de las acciones de estas personas.
