La Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC) ha acusado a Coinbase de “posible violación de la ley de valores”. El regulador ha cuestionado la legalidad de las operaciones del criptoexchange.
Coinbase publicó en su blog que el criptoexchange había recibido una notificación formal de sospecha (notificación Wells) de la SEC, en la que el regulador informaba a la empresa de una sospecha de “posible violación de la ley de valores” y de la voluntad de adoptar medidas coercitivas.
Representantes del criptoexchnage enviaron una solicitud a la SEC, pidiendo aclaraciones sobre qué activos de la plataforma identificaba exactamente el regulador como valores. Según Paul Grewal, director jurídico de Coinbase, la SEC “se ha negado a hacerlo”. En su opinión, la investigación del regulador no sólo apunta a algunos de los activos digitales del exchange, sino también a los servicios Coinbase Earn, Coinbase Prime y Coinbase Wallet.
Brian Armstrong, cofundador y CEO de Coinbase, señaló que el exchnage había recibido la autorización comercial de la SEC hace dos años, cuando el regulador examinó a fondo todos los activos y servicios de la plataforma. Armstrong calificó de “extrañas” las actuales amenazas del regulador, ya que la SEC no ha nombrado “ni un solo problema específico con ninguno de los activos” de Coinbase como parte de su investigación.
Armstrong también opina que las acciones actuales de la SEC están directamente relacionadas con una petición de Coinbase escrita en defensa de los servicios de staking de criptomonedas, en la que los representantes del exchange de criptomonedas afirmaban que el regulador simplemente “no entiende los criptoproductos, activos y servicios”. La petición se escribió en febrero de 2023, justo después de que la SEC cerrara el programa de staking de criptomonedas de Kraken.
Los representantes del criptoexchange afirman que todos los productos y servicios de Coinbase siguen funcionando con normalidad. Según el CEO de Coinbase, el criptoexchange está dispuesto a responder a las “amenazas legales” de la SEC en los tribunales para proporcionar a la criptoindustria la claridad regulatoria de la que carece actualmente. Armstrong acusó a los reguladores estadounidenses de no haber conseguido “llegar a un denominador común” en la regulación del mercado de las criptomonedas. “Imagínese que hay árbitros de fútbol y de soccer en el campo, pero en realidad estamos jugando al pickleball. Los árbitros simplemente no pueden ponerse de acuerdo sobre las reglas del juego”, afirma Armstrong, aludiendo una vez más a la incompetencia de los reguladores en relación con el mercado de las criptomonedas.
La criptocomunidad también ha acusado a la SEC de incoherencia. En su opinión, “aprobar la dirección” de un criptoexchange y un año después “demandar por algo que ellos mismos aprobaron previamente” es, como mínimo, “ridículo”. La acción del regulador contra Coinbase también ha llevado a la comunidad a preguntarse “cuál es el verdadero propósito de la SEC”.
Recordemos que anteriormente la industria de blockchain estadounidense y los responsables políticos acusaron a la SEC de extralimitarse en sus funciones, alegando que carece de autoridad legal para regular el mercado de las criptomonedas.