El índice de precios de consumo de EE.UU. registró un ligero aumento en febrero. Los mercados tradicionales reaccionaron con una mayor volatilidad, pero las cotizaciones del BTC subieron a su nivel más alto desde junio de 2022.
El Departamento de Trabajo estadounidense publicó los datos del índice de precios de consumo (IPC) de febrero de 2023. Según el informe, la inflación estadounidense aumentó un 0,4%. Al mismo tiempo, la tasa de inflación a 12 meses fue del 6%, la más baja desde septiembre de 2021. Sin embargo, la Fed había previsto reducir esta cifra al 2%.
Los analistas de CNBC informan de una alta probabilidad de nuevas subidas del tipo de interés de referencia y señalan que los mercados tradicionales han reaccionado a la publicación de los nuevos datos del IPC con una mayor volatilidad. Al mismo tiempo, el Bitcoin reaccionó al alza a la publicación de los datos de inflación. BTC subió hasta 26.514 $ en ese momento, según CoinMarketCap.
La primera criptodmoneda también se vio afectada por la estabilización del sector bancario, que registró una importante caída el día anterior. Así, el First Republic Bank (FRC), el más afectado el martes 14 de marzo, recuperó un 54% de su valor, Western Alliance Bancorporation (WAL) un 46%, KeyCorp (KEY) un 15% y así sucesivamente. Esto afectó a las cotizaciones de los activos de riesgo, entre los que se incluyen las criptomonedas.
Tras el establecimiento de máximos locales, el valor del BTC cayó hasta la zona de los 25.000 $, pero los expertos predicen la posibilidad de un mayor crecimiento, basándose en los datos del mercado de derivados. Así, se observa el cierre masivo de posiciones cortas por parte de traders profesionales, que se produce en un contexto de preservación de posiciones largas abiertas con el uso de fondos de margen. El índice de miedo y codicia del Bitcoin subió de 33 a 56 puntos en dos días, lo que también indica que los participantes en el mercado están de humor optimista.
Sin embargo, es demasiado pronto para hablar de un nuevo “rally” de BTC, ya que la primera criptomoneda se ve afectada por muchos factores limitantes, uno de los cuales son los planes del gobierno estadounidense de imponer un impuesto adicional a los mineros en 2024.