Las principales instituciones financieras internacionales instan a los bancos centrales a diseñar sus CBDC por adelantado considerando la posibilidad de una interoperabilidad futura.
Las monedas digitales emitidas por bancos centrales (CBDC, por sus siglas en inglés) deben inicialmente diseñarse con interoperabilidad para evitar tales problemas en el futuro. Esta es la opinión expresada en un informe del Future of Payments Working Group (FoP), que reúne a representantes del Banco de Pagos Internacionales (BPI), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
Actualmente, muchos proyectos de CBDC están siendo desarrollados activamente, pero los aspectos clave de su arquitectura para una interoperabilidad futura siguen sin abordarse. Por esto, se necesita cooperación internacional en el desarrollo de estándares comunes para las monedas digitales emitidas por bancos centrales para superar los problemas existentes con los pagos transfronterizos que utilizan CBDCs.
El informe analiza los mayores proyectos de CBDC ya lanzados o listos para ser lanzados: Jasper-Ubin, Aber, Prosperus, MAS, Helvetia, mBridge, HSBC, Jura, Dunbar, e-CNY, Sand Dollar, DCash y eNaira.
La interoperabilidad o la adopción de estándares de CBDC comunes permitirán que los proveedores de servicios de pago (PSP, por sus siglas en inglés) operen en todos los sistemas. La interoperabilidad reducirá los costos, acelerará las transacciones y hará que los servicios bancarios sean más accesibles y transparentes.
El desarrollo coordinado de CBDC también mejorará la lucha contra el lavado de dinero (AML) y los mecanismos de verificación de usuarios (KYC); pero, para esto, los bancos centrales deberían unir fuerzas para trabajar en la interoperabilidad de sus monedas digitales. Además, esto debe hacerse en una etapa temprana de desarrollo, mientras la oportunidad persiste.
Se debe recordar que tanto los representantes de las instituciones financieras como los usuarios comunes esperan la introducción generalizada de las CBDC. Según una encuesta reciente de The Economist, alrededor del 65% de los usuarios esperan que las monedas digitales emitidas por bancos centrales reemplacen completamente la moneda física de su país durante la próxima década.