La empresa Ripple Labs ha logrado una victoria parcial sobre la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) en un proceso judicial sobre la situación legal del token XRP.
Se ha sabido que el Tribunal Federal del Distrito Sur de Nueva York se ha puesto de parte de Ripple Labs en una disputa con la SEC. Así, la juez Analisa Torres dictaminó que el token XRP no es un valor. Pero la victoria resultó ser parcial, ya que la sentencia sólo se refiere a las ventas de XRP a inversores minoristas, mientras que cuando se vende a inversores institucionales, el activo sigue cumpliendo la prueba de Howey y puede considerarse un valor.
La sentencia se concedió por juicio sumario. Incluso a pesar de la ambigüedad de la sentencia, la comunidad de criptomonedas está celebrando la victoria, ya que el regulador pretendía originalmente restringir por completo la capacidad de Ripple de utilizar XRP para financiar sus actividades. Sin embargo, la SEC aún tiene la oportunidad de apelar la decisión en instancias superiores. Además, el regulador acusó a Ripple Labs de que la empresa ganó más de 700 millones de dólares con la venta de XRP específicamente a inversores institucionales. Esa acusación fue desestimada, pero también podría recurrirse ante el tribunal de apelaciones.
Mientras tanto, el precio del XRP en las bolsas se disparó un 25% en menos de una hora desde que se conoció la sentencia judicial, y su valor subió más de un 100% en horas punta. A las 11:00 (GMT+3) del 14 de julio, el aumento diario es del 65%, y el token se ha convertido en la cuarta más capitalizada de todas las criptomonedas. Además, los exchanges de criptomonedas Kraken e iTrustCapital ya han restablecido la negociación del XRP, Coinbase ha anunciado la reanudación de la negociación del activo en un futuro próximo, y es probable que Gemini y otras plataformas importantes le sigan pronto.
Además, muchos expertos y líderes de opinión han expresado la opinión de que la decisión judicial actual puede convertirse en un precedente importante y tener un impacto significativo en el resultado de los casos judiciales de la SEC contra Coinbase y Binance, así como, en general, en la capacidad del regulador para ejercer el control sobre la industria de las criptomonedas. Recordemos que el litigio de la SEC contra Ripple Labs está en curso desde finales de 2020.