El fork: ¿qué es?
Un fork se puede interpretar literalmente como una «ramificación», algo que resume bastante bien la esencia misma del proceso. Las criptomonedas se basan en la tecnología blockchain y el fork es la división de una blockchain en dos nuevas cadenas que son independientes entre sí.
Sin embargo, según el tipo de fork, es posible que la blockchain no se separe (ver más abajo).
¿Por qué ocurre un fork?
Existen dos razones principales:
- Corrección de errores críticos;
- Un desacuerdo fundamental entre los desarrolladores sobre el futuro del proyecto.
En el primer caso, la corrección de errores implica la reversión de todo el sistema a un determinado estado, es decir, a un número de bloque. Sin embargo, algunos usuarios no están de acuerdo con esto. En este caso, una parte retrocede y otra continúa trabajando con el error crítico, aceptándolo como parte del sistema. Por ejemplo, Ethereum Classic (ETC), surgió como un fork de Ethereum (ETH) después de que el proyecto The DAO fuera hackeado.
En el segundo caso, algunos usuarios pueden apoyar la introducción de nuevos protocolos de encriptación o mejoras en el formato de bloque, mientras que la otra parte se opone a tales innovaciones u ofrece opciones alternativas para su implementación. Tal conflicto puede causar un fork, después del cual cada parte de la comunidad podrá poner en práctica sus puntos de vista. Por ejemplo, Bitcoin Cash (BCH), surgió como un fork de Bitcoin (BTC).
Forks accidentales y planificados
Los forks pueden ocurrir por accidente. Dado que todos los cálculos se ejecutan en una red descentralizada, el siguiente evento es posible: dos mineros diferentes minan un nuevo bloque casi simultáneamente, creando dos cadenas de bloques. Sin embargo, el mecanismo de consenso permite calcular rápidamente la cadena real y sincronizar todo el sistema.
Como regla general, los forks planificados se realizan después de discusiones y por decisión de una parte de la comunidad. El fork se anuncia con anticipación y puede tener dos formas e involucrar dos tipos diferentes de eventos.
Tipos de forks planificados: duro y suave
Los forks planificados se dividen en dos tipos:
- Hard fork (Fork duro). Este tipo implica un cambio significativo en una criptomoneda: el código fuente, la tecnología, las reglas de minería, etc. Un hard fork en realidad crea una nueva criptomoneda en lo sucesivo. Todos los usuarios que deseen apoyarla deben actualizar su software a la última versión. Las monedas ya no son intercambiables después de un hard fork, por lo que los usuarios que cambiaron a la nueva versión convertirán automáticamente sus ahorros a una tasa predeterminada.
- Soft fork (Fork suave). Este tipo implica cambios técnicos menores, compatibilidad con versiones anteriores y reglas generales. Después de este fork, las monedas siguen siendo fungibles y la nueva blockchain continúa admitiendo versiones de software antiguas. De hecho, es una actualización del sistema programada ya que todos los usuarios cambian gradualmente a la versión actualizada.
Los mayores forks
Debido a la popularidad de la creación de Satoshi Nakamoto, los forks de Bitcoin son los más numerosos. El primero y más grande fue la separación de Bitcoin Cash (BCH), que tuvo lugar el 1 de agosto de 2017. El motivo fue un desacuerdo sobre el aumento del volumen de bloques y la introducción de un nuevo protocolo. El 15 de noviembre de 2018, BCH generó su propio hard fork, Bitcoin SV (BSV). Ambas monedas se cotizan con éxito en el top 100.
Ethereum (ETH) experimentó un hard fork el 20 de julio de 2016. Esto fue el resultado de un hackeo a The DAO. En ese momento, era el proyecto de financiación colectiva más grande, recaudando alrededor de 150 millones de dólares a través de una ICO. Sin embargo, se descubrió una vulnerabilidad en el código fuente abierto del proyecto y los atacantes lograron robar alrededor de un tercio de todos los fondos recaudados. La situación resultó en un hard fork. En una rama no hubo un hackeo, se solucionó la vulnerabilidad y los fondos robados se devolvieron a las cuentas de The DAO. La otra rama, denominada Ethereum Classic (ETC), fue hackeada y el desarrollo posterior de la red tuvo en cuenta este evento.
Clonación vs. Forks
Muchos “expertos” confunden los conceptos de los forks con la clonación. Es importante entender la diferencia. La clonación implica el uso de una copia del código fuente abierto de la criptomoneda. Un clon comienza con una nueva blockchain y un registro limpio, suponiendo mejoras tecnológicas menores o simplemente un cambio de nombre. Muchas altcoins se crearon exactamente como clones de Bitcoin, evolucionando con el tiempo en proyectos tecnológicos completamente diferentes.
Litecoin (LTC) es un buen ejemplo. A menudo se considera como un fork de Bitcoin, aunque esto es fundamentalmente incorrecto. Litecoin era originalmente un clon, lo que significa que, en el momento de su lanzamiento, esta criptomoneda usaba el código fuente de Bitcoin con cambios menores en cuanto a la velocidad de generación de bloques y el Proof-of-Work. Sin embargo, el proyecto fue creciendo y hoy es una plataforma para la implementación de tecnologías más avanzadas. Por ejemplo, SegWit, el protocolo utilizado en Bitcoin (BTC) en la actualidad, se introdujo por primera vez allí.
El concepto de fork: la capacidad de elegir
En resumen, un fork es una oportunidad para crear una nueva criptomoneda basada en una existente. Si la comunidad apoya completamente el fork, la «versión anterior» del proyecto simplemente deja de existir. Si parte de la comunidad rechaza aceptar las nuevas reglas, dos redes de blockchain comienzan a operar en paralelo, incluida la «antigua» y la «nueva».
Esta situación se ilustra más claramente con los eventos recientes en torno a Ethereum, la parte principal de la cual cambió de Proof-of-Work a Proof-of-Stake como resultado del fork de “The Merge”. Sin embargo, parte de la comunidad no estuvo de acuerdo con este estado de cosas. Se unieron en la organización ETHW Core y mantuvieron su propio fork, apoyando una versión de Proof-of-Work de la red Ethereum, denominada EthereumPoW, que tiene un tope de más de 710 millones de dólares al 31 de octubre de 2022, con 87 millones de usuarios que tienen tokens ETHW.