El campo de la información está lleno de noticias sobre proyectos de criptomonedas y Web3 que lucen tentadores para la inversión. Estos proyectos llevan a cabo airdrops, ICOs y otras formas de recaudación de capital que CP Media cubre con regularidad. Este contenido siempre viene con una advertencia de que la información presentada no contiene consejos de inversión, y los lectores deben hacer su propia investigación sobre cualquier proyecto con el que planeen interactuar de alguna manera. Esta lista de verificación te ayudará con ese análisis.
¿Cómo evaluar la calidad de los criptoproyectos?
El término “calidad” aquí se refiere a confiabilidad, integridad, perspectivas y mitigación de riesgos. Una lista de verificación para tal análisis podría incluir estudiar la siguiente información:
- El concepto general del proyecto. ¿El proyecto articula claramente su misión? Si no, esto es motivo de preocupación.
- White paper. La presencia de tal documento técnico para proyectos Web3 se ha convertido en un estándar común. Sin embargo, el valor clave no es el hecho de tener este documento, sino la información que el mismo contiene. El white paper debería complementar y expandir la idea general de lo que es el proyecto y qué hace.
- Roadmap. Esta es la información sobre los objetivos que los creadores del proyecto buscan cumplir y sus estrategias para lograrlo. El roadmap u hoja de ruta también puede incluir una descripción de las etapas de desarrollo del proyecto. Lo principal en este punto son objetivos claros, precisos y realizables. Si el proyecto no es nuevo, debes prestar atención a las etapas que ya se han implementado y su cumplimiento con los planes establecidos. El roadmap puede ser parte del white paper o ser un documento aparte.
- Documentación técnica. Los proyectos Web3 se construyen en su mayoría con el principio de software de código abierto, es decir, tienen código abierto y una descripción detallada de la tecnología. El concepto de Web3 supone que la comunidad del proyecto pueda trabajar en su código, así que está disponible en GitHub. Las señales sospechosas pueden incluir la ausencia de una descripción técnica clara, particularmente si no proporciona una comprensión integral de sus principios de funcionamiento y si el código se mantiene privado.
- El estado actual del proyecto. Es esencial entender en qué etapa se encuentra el producto o servicio: ¿es una idea, un prototipo o un proyecto completamente funcional? Esto dejará claro qué es necesario invertir y qué aspectos se pueden examinar más de cerca.
- Auditoría de seguridad. Considerando el aumento de la actividad de los hackers, los proyectos Web3 deben realizar auditorías de seguridad obligatorias en su infraestructura técnica. Preferiblemente, deberían ser transversales y regulares. Por regla general, los detalles sobre las auditorías se presentan claramente en el sitio web del proyecto y se pueden corroborar en las páginas de las empresas auditoras. Cuanto más conocidas sean las estructuras que realizan las auditorías de seguridad, más confiable será el proyecto y viceversa.
- El equipo del proyecto. Se trata de un punto importante porque las perspectivas de un proyecto en particular dependen directamente del equipo que trabaja en él. Es preferible cuando se conocen a los fundadores y a la alta dirección, y hay oportunidad de verificar que son personas reales. Un gran plus sería si tienen las competencias adecuadas o experiencia en lanzamientos exitosos de proyectos en la esfera Web3. Si el equipo es anónimo, pero tienen cuentas en Twitter o Discord bien conocidas y respetadas, no es lo ideal, pero puede ser aceptable para los criptoproyectos. Si la información sobre el equipo no está disponible o es poco confiable, es una clara señal de fraude.
- Comunidad y comunicación. Fíjate en la actividad del proyecto en redes sociales, foros y otras plataformas. Si existe movimiento, es esencial prestar atención a las actividades de la comunidad. Una comunidad activa para proyectos Web3 es uno de los factores clave para el éxito. Por otro lado, las redes sociales recientemente creadas y vacías son una señal indirecta de un proyecto dudoso. La interrupción abrupta de la comunicación en las redes sociales también es cuestionable.
- Finanzas y financiación. Los grandes inversores son una señal indirecta de la solvencia del proyecto, ya que tales organizaciones realizan una verificación exhaustiva antes de asignar fondos. La información sobre las inversiones atraídas debe ser verificable. Además, otras fuentes de financiamiento del proyecto, como ICOs, IEOs, IDOs y otras formas de atracción de inversiones, y su éxito, deben ser estudiadas. Un factor importante es la información sobre la distribución de los fondos recaudados. La transparencia financiera es un buen indicador.
- Asociaciones y cooperación. ¿Con quién colabora el proyecto o con quién tiene la intención de colaborar? ¿Cuál es la naturaleza de estas asociaciones? La presencia de importantes socios tecnológicos, informativos, legales y de otros tipos, así como la naturaleza de la interacción, afecta directamente las perspectivas de desarrollo del proyecto.
- Tokenomics. ¿Qué tokens están representados en el ecosistema y cuáles son sus funciones? ¿Cómo se distribuyen los tokens? ¿Existen grandes poseedores (ballenas)? ¿Qué medidas se toman para incentivar la posesión y uso de tokens? Al responder a estas preguntas, uno puede obtener una idea de los factores internos y los riesgos asociados con un activo digital en particular.
- El mercado. El tamaño del mercado objetivo debe ser analizado, así como los principales competidores y las ventajas que el proyecto tiene sobre ellos.
- Regulación. Los problemas regulatorios desempeñan un papel significativo y pueden crear riesgos y oportunidades adicionales para los inversores. Es esencial averiguar en qué jurisdicción está registrado el proyecto y si cuenta con las licencias o permisos requeridos para sus actividades comerciales.
Además, se deben evaluar todos los posibles riesgos asociados con la tecnología utilizada, las condiciones del mercado, las acciones regulatorias, los factores macroeconómicos y otros. Además, recuerda que cualquier inversión implica un riesgo potencial ya que nadie está exento de errores humanos y circunstancias impredecibles.