Los criptoproyectos fraudulentos utilizan activamente las identificaciones de personas reales que están dispuestas a proporcionar sus datos a los delincuentes por una pequeña cuota.
Según un artículo del blog de la empresa de seguridad de blockchain CertiK, los estafadores están utilizando activamente el mercado negro para comprar las identidades de personas reales, denominadas «actores de KYC».
Estas personas facilitan voluntariamente a los defraudadores sus datos personales, que son utilizadas para ganar credibilidad en la criptocomunidad antes del «hackeo o fraude».
Los analistas de CertiK han descubierto que el coste de un «actor de KYC» ronda los 8 $ por transacción y que se utilizan con mayor frecuencia para eludir el proceso básico de KYC al abrir una cuenta bancaria o de intercambio. En raras ocasiones, si los estafadores tienen que poner un nombre real o una foto del «actor de KYC» en la página web de su proyecto, se les pagará más, entre 20 y 30 dólares. Por el «papel» de, por ejemplo, director general de un criproproyecto fraudulento, un «actor de KYC» puede recibir hasta 500 $ por semana.
La investigación de CertiK demostró que el mercado negro de “actores de KYC” se concentra en Telegram, Discord, aplicaciones móviles y sitios web especializados. Los analistas de CertiK han podido encontrar una veintena de plataformas de contratación de «actores de KYC». Pero la mayoría se concentra en el sudeste asiático, donde hay de 4.000 a 300.000 participantes en tales plataformas.
Además, los analistas de CertiK encontraron unos 40 sitios web que están diseñados para verificar el equipo del proyecto de criptomonedas y conceder “distintivos de KYC”, pero cuyos servicios son simplemente inútiles, ya que los estafadores están utilizando «actores de KYC». Los métodos de comprobación de estos sitios son «demasiado superficiales» para detectar el fraude, pero estos servicios ya han entregado más de 2.000 «distintivos de KYC», que en la mayoría de los casos se colocan en sitios fraudulentos.
Como recordatorio, los estafadores son los más activos a la hora de utilizar las redes sociales para robar activos digitales, y las estafas románticas se han convertido en el segundo tipo más común de estafa con criptomonedas después de las estafas de inversión. En este contexto, el gobierno australiano está tratando de concienciar a los ciudadanos sobre cómo proteger sus criptoactivos y reconocer las estafas.