Bitcoin es la mayor criptomoneda. Según TradingView, el dominio de Bitcoin a mediados de septiembre de 2023 es de aproximadamente el 50%. La capitalización de Bitcoin en el momento de escribir estas líneas es de más de 502.000 millones de dólares, mientras que la capitalización total del mercado de criptomonedas es de 1,04 billones de dólares.
Bitcoin no sólo tiene importancia económica, sino también psicológica. Es BTC la criptomoneda que tiene el mayor nivel de descentralización y la mayor confianza entre inversores y usuarios. No en vano, la primera criptomoneda se denomina “oro digital”: es una especie de punto de referencia y su depreciación total provocará, casi con toda seguridad, el colapso del criptomercado. Pero, ¿es posible el colapso de Bitcoin? Intentemos averiguarlo.
¿Es posible el colapso de Bitcoin?
Desde un punto de vista puramente teórico, el colapso de Bitcoin es posible. Pero actualmente BTC tiene la mayor estabilidad entre todas las criptomonedas, y por lo tanto su colapso parece el escenario menos probable.
Los principales factores que aseguran la resistencia de Bitcoin son:
- Oferta limitada. BTC es un activo deflacionista, su oferta total es limitada, lo que crea una escasez que puede mantener o aumentar el valor del activo manteniendo el nivel de demanda.
- Descentralización. La red de blockchain de Bitcoin está altamente descentralizada, lo que la hace relativamente independiente de gobiernos, corporaciones y otras estructuras organizativas, dificultando su regulación y restricción.
- Seguridad. El algoritmo de consenso Proof-of-Work y la gran red descentralizada permiten que BTC siga siendo una de las criptomonedas más seguras.
- Comunidad. Debido a las peculiaridades del concepto de Bitcoin y al código fuente abierto, se ha formado una gran comunidad en torno a la primera criptomoneda, que en realidad gestiona y desarrolla el proyecto, lo que garantiza un alto nivel de confianza en el sistema.
- Efecto red. Cuanta más gente utilice BTC, más popular, útil y demandada será.
- Naturaleza global. Bitcoin está disponible y se utiliza en muchos países del mundo, por lo que es menos susceptible a las crisis económicas o políticas de determinadas regiones.
- Diversidad de participantes. Bitcoin se utiliza en inversiones, comercio y se está adoptando cada vez más en el comercio electrónico. Además, BTC ya es la moneda oficial en El Salvador y en el territorio de Próspera, la zona económica libre de Honduras. Estos factores aumentan la relevancia económica y la sostenibilidad de la primera criptomoneda.
En resumen, Bitcoin es un fenómeno económico y tecnológico único, pero no se puede descartar completamente la posibilidad de su colapso.
¿Bajo qué escenarios es posible el colapso de Bitcoin?
En teoría, Bitcoin podría devaluarse completamente bajo varias condiciones:
- Pérdida de confianza. El descubrimiento de una vulnerabilidad crítica en el protocolo de la primera criptomoneda o un fallo tecnológico prolongado en la red de blockchain podría dañar la confianza en Bitcoin.
- Centralización. Las grandes corporaciones están realizando ciertos movimientos para hacerse con el control de la potencia de cálculo de la primera criptomoneda y, si tienen éxito, podrían hacerse con su control.
- Regulación. Si la mayoría de los grandes países o bloques de estados imponen prohibiciones o restricciones estrictas al uso de BTC, podría socavar la demanda del activo.
- Competencia. En teoría, es posible que surjan otras criptomonedas o tecnologías financieras que puedan sustituir a BTC, ofreciendo mayor calidad de servicios, fiabilidad, etc.
En la actualidad, todos los factores mencionados parecen poco realistas. La simplicidad tecnológica de Bitcoin en comparación con otras criptomonedas más modernas y su modelo de gobernanza minimizan la probabilidad de fallos críticos. Los problemas de centralización también se resuelven con la gobernanza colectiva, y la posibilidad de una prohibición global de Bitcoin a nivel estatal sólo existe en China, que ya se ha aprovechado de ello, pero sin embargo la minería de BTC continúa en el país.
La pérdida de interés por la primera criptomoneda no es amenazadora, dado que Bitcoin es el activo más rentable de la historia. Además, BTC se está transformando gradualmente de un medio de pago a un elemento de capital fijo. Bitcoin se encuentra en una posición muy ventajosa: es la criptomoneda más conocida, fiable, cara, respetada y descentralizada. No hay competidores evidentes, y las perspectivas de que el gran capital se haga con el control de la red de blockchain parecen efímeras por ahora.
Por otra parte, la situación cambia constantemente y no se puede descartar la aparición de un cisne negro. Además, es posible una devaluación completa de Bitcoin en caso de acontecimientos catastróficos a escala mundial: catástrofes naturales o guerra nuclear. Pero tales acontecimientos irán acompañados de la destrucción física de la infraestructura digital y del colapso total de la civilización, de modo que la depreciación de Bitcoin parecerá el menor de los males.
